Los animales son seres vivos, no regalos.

Hace algunos meses en este blog, hablábamos de la "Tenencia Responsable", haciendo hincapié en la necesidad de evitar la compra y el regalo impulsivo en la época navideña. "Debemos desterrar la compra o la adopción impulsiva, animados por la ilusión de los "pequeños de la casa", o por fechas señaladas como los cumpleaños o la  Navidad." 
Es cierto los animales son seres vivos, NO OBJETOS

Estamos en Navidad y pensamos en los regalos para nuestros amigos, en los que vamos a recibir; libros, discos, juguetes, televisiones, ordenadores, relojes,...y animales. Pero existe un "intruso" en el listado anterior. ¿Adivinas  cual?. Los animales son seres vivos, no son objetos. Cuando regalamos cualquier objeto, si quien lo recibe, no le hace gracia, puede cambiarlo, tirarlo, olvidarlo en el armario.... ¿Alguien cree que esto se puede hacer con un ser vivo?.

Estas son unas fechas que invitan (pese a la crisis) a la compra impulsiva. Un animal exótico, extraño, bonito,  nos atrae, "vamos a ser los reyes del regalo", "originales, a nadie se le va a ocurrir".Sin embargo días después muchos de estos "regalos" acaban sufriendo, por falta de información sobre sus necesidades, sobre su conducta que a veces puede resultarnos desagradable, por falta de tiempo para atenderlos... 

Otras veces, compramos animales tales como peces, hamsters, pajaritos, pensando que son "inferiores", que total si se mueren....Los "cosificamos", pero son seres vivos. Con derecho a vivir, que sufren y sobre los que no tenemos poder.

Las estrellas del "ranking" en regalos navideños siguen siendo los perros, los gatos y últimamente, los conejos y los hurones. Algunos de ellos acaban en el campo, en las ciudades formando colonias o atropellados en la carretera mientras buscaban la vuelta a casa. 

Todos los animales, desde los más pequeños a los mas grandes, desde las aves o los peces, hasta los mamiferos, son seres vivos, resultado de millones de años de evolución.

Antes de regalar un animal en Navidad reflexiona y hazte estas preguntas:

• ¿Esta dispuesto el receptor del "regalo" a asumir la responsabilidad, de convivir con un ser vivo durante todos sus años de vida?. La responsabilidad es a largo plazo.
• La familia, las personas que conviven con esa persona, ¿están también dispuestas a aceptar la responsabilidad?. Es una responsabilidad compartida.
• ¿Conoce las necesidades, los hábitos, los cuidados del "regalo" elegido?, ¿tiene tiempo para satisfacer esas necesidades?. Es una responsabilidad que exige tiempo y espacio.
• ¿Esta dispuesto a cuidar de la salud del "regalo" para evitar que enferme y de poner los medios para su curación si enferma?. Es una responsabilidad que cuesta dinero.
• Y sobre todo, tiene y tienes completamente claro que NO ES UN REGALO, ES UN SER VIVO.

Si la respuesta a todas estas preguntas es SI, no lo dudes, adopta o regala un "compañero peludo". Si la respuesta a todas estas preguntas es SI, pocas cosas en esta vida te van a dar tantos buenos ratos, tanta compañía, tanto amor sin pedir nada a cambio.

Si has dudado o dudas y si desde luego alguna de las preguntas tiene un NO como respuesta, piensa en otro obsequio, en un objeto, no en un ser vivo.